No sé si te ha pasado que en algún momento de tu vida has tenido alguna experiencia (vamos a pensar en las agradables) que la asocias a una canción o melodía en particular. Cada vez que escuchas esa canción te recuerda la experiencia vivida, y como estamos pensando en experiencias agradables, sientes que te transportas a ese momento, se te eriza el cabello y hasta tienes que cerrar los ojos y pasar un video mental por tu cerebro de aquél momento. Cuando conocí a quien hoy es mi esposa, recién había comprado el álbum de Boston “Walk On”. Hay dos canciones de ese álbum que me transportan a esos días cuando pensaba que jamás iba a poder tener una relación romántica con ella: “Surrender to Me” y “Livin’ For You”. Es como volver a vivir el momento otra vez. Haz el ejercicio con algún recuerdo tuyo.