Para el segundo trimestre del 2012 las aplicaciones maliciosas (malware) dirigidas al sistema Android experimentaron un aumento de casi 20,000, con algunas incluso llegando a Google Play donde fueron descargadas unas 700,000 veces. Los métodos para obtener dinero usados por los creadores de dichas aplicaciones varían desde cobrar por supuestos servicios tipo premium, hasta hacer el teléfono parte de un botnet. El interés de los delincuentes en la plataforma Android es obvio, esto seguramente gracias al continuo crecimiento en popularidad de ésta y su entorno abierto, a diferencia del entorno cerrado de iOS. ¿Cuáles son las aplicaciones maliciosas más comunes? Las que imitan o falsifican aplicaciones legítimas, las que supuestamente rootean el teléfono y las herramientas de acceso remoto. La recomendación para evitar el contagio sigue siendo la misma: No descargar aplicaciones pirateadas o de origen desconocido.
Fuente: Segu-Info, Trend Micro